Lo Que Miro

      En la vida de creyente me he encontrado con un conflicto: Ya mi vida no es mía. Y cuando verdaderamente me di cuenta de eso y de lo que eso significaba me sentí desarmada, no se si la palabra maniatada lo explique bien. Espero pueda saber explicarme más adelante. Me fui a buscar de al diccionario de la RAE para ver si le atiné usando esa palabra

Maniatado:

•Atar las manos.

•Atar, esposar, inmovilizar, sujetar, encadenar.

     Y si, si quiero expresar que así es que me he sentido, más en los términos de inmovilizar y sujetar. Creo que en éste versículo El Maestro lo deja claro cuando le dice a Pedro:

"De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías, e ibas a donde querías; 

mas cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras. 

Esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. 

Y dicho esto, añadió: Sígueme."

     Qué les quiero decir con esto? Pues que por primera vez me di cuenta, fue como una revelación, que cuando decides entregar la vida al Mesías, es cosa seria, y que de verdad tu vida ya le pertenece. Cuando lo aprendes, o mejor dicho, cuando Él te lo hace aprender de ésta manera, luego ya no tomas decisiones por tí mismo como si te mandaras solo, como si fueras tu propio dueño, como si te las supieras todas... y ayayay! de las consecuencias si así lo hicieras... al menos eso es lo que he aprendido. Y antes de toda esta REFLEXIÓN me decía a mi misma, como en tono de frustración: En mi vida pasada me era más fácil tomar decisiones, iba y venía como quería, pensaba un poco en las consecuencias pero no tanto. Claro, Era una mujer decidida. Si, Una mujer del MUNDO decidida. Luego analizando los hechos de mi vida, y teniendo un poco más de par de años donde me he sentido como les dije al principio: maniatada. Bien sujeta, a veces encerrada, Pero Libre...(Es difícil de explicar. Creo que también de entender, ahi vamos...). Porque ahora no me atrevo a mover más de dos dedos sin que El Padre me lo diga que así haga. Y digo dos dedos y no uno porque a veces para cosas "sin importancia", me muevo. Pero el punto es ese, que ya no soy mi dueña, ni tu eres tu propio dueño, ni tu cuerpo es tuyo, ahora es Su templo, Su habitación. Es que ni el decidir para dónde te vas el año que viene, ni en qué quieres trabajar. Y este conocimiento nos puede golpear mucho, pero es una verdad. Él nos compró, cuando éramos esclavos El desembolsó su propia sangre valiosa, pura y preciosa para comprarnos, y ser libres pero en Él, movernos, existir y vivir en Él . Y Su Sangre fue el Único pago posible por Su valía. Y puede parecer repetitivo pero SÓLO Él sabe, tiene la visión completa de nuestro bienestar, entonces puedes ser libre de las consecuencias, porque siempre que hagas lo que El te pide, será para bien... verdaderamente libre.  

     Antes yo decía, si, claro que le pertenezco, El me compró. Es mi dueño... yo lo sabía, pero intelectualmente, sin entendimiento espiritual ni revelación de lo que real y experimentalmente eso significa. Y es que lo veo ahora tan claro, como algo tan impactante.

     Par de días después estaba leyendo las Escrituras y me encuentro de manera repetitiva, y resaltante, como si esas palabras saltaran y las otras no, donde El mismo Yeshúa (Jesús) dice: Yo no hago nada de mi mismo, sino lo que veo hacer al Padre...ó Yo no digo nada de mi propia cuenta si no lo que oigo decir al Padre...ó mis palabras no son mías, sino del Padre que me envió. ...ó si no me creen a mi,  creed en las obras que hago que son del Padre (todas las citas tomadas del evangelio de Juan...) Allí mi mente estalló. Si el mismo Señor, El Amo, Dios, por medio del cual fueron hechas todas las cosas, se sujetaba de esa manera, que quedará para nosotros... qué quedará para mí. Me consuela saber que El Padre nos dice: "Te mostraré el camino por el que debes andar, No seas como el caballo o como el mulo, que no tienen entendimiento; cuyos arreos incluyen brida y freno para sujetarlos, porque si no, no se acercan a ti..."(salmo 32)....Primero tenemos que entender lo que Él nos quiere decir...

     De este principio entendí otro también muy importante: Que Lo que miro es lo que me define y me modela. Lo que miro es lo que adoro (al dejarme modelar obedeciendo). Es un principio, Yeshua hacía lo que veía hacer al Padre. Y decía lo que oía decir al Padre. Adoraba con cada acción y palabra. No hacia nada de si mismo ni decía nada de si mismo. La decisión correcta se la iba dictando El Padre, mientras lo miraba, mientras permanecía en Su intimidad.

     Entonces, para concluir, Si miramos las circunstancias, nos comportamos como ellas, que son variables, un día bien, un día mal... 

     Si miramos a quien nos perjudica, juzgando y estando pendiente del que nos hace mal, y del mal que nos hace, terminaremos adoptando sus conductas, buscando la manera de hacerle mal, en amargura, etc...

     Si nos miramos a nosotros mismos, como foco central, caeremos en toda suerte de vicios, ya sea en frustración porque somos débiles y falibles; o el polo opuesto, autosuficiencia, soberbias, etc

     Es decir, en cualquiera de los casos, como olas llevadas por situaciones, personas, emociones, doctrinas, sin firmeza, de doble ánimo, en fin sin Santidad, porque la Santidad significa ser separado, de una SOLA SUSTANCIA Y ESENCIA, puros y sin mezcla.  Pero... siempre tenemos la buena noticia, eso es el evangelio, la buena noticia de que no estamos perdidos en nosotros mismos:

     Si perseveramos en mirar a la Fuente de toda Santidad, la Palabra Eterna hecha Persona, la Verdad inconmovible, a Nuestro Padre, nuestro resultado será ser más como ÉL. Lo que nos muestre en el secreto de Su Gloria, de Su esencia, eso terminamos revelando al Mundo. Cuando nos hagamos uno con Él, Seremos el reflejo de ese Espejo de Gloria, si lo que vemos lo ponemos por obra. Así como Moisés construyó el tabernáculo tal y cómo le fue mostrado en lo celestial, así mismo nos seguiremos edificando de lo que vemos hacer o ser a Nuestro Padre. Nuestro Modelo a seguir. Y de verdad podríamos decir: Ya no vivo Yo, vive Cristo en Mi...!!!! Eso para mi es la mejor noticia!