Ya entendí lo que pasó...
Lo reconozco, descuidé mi intimidad Contigo, por su puesto nuestra relación y por ende el sacerdocio; lo cual me debilitó y por eso aquella oscuridad se hizo palpable, se me hizo grande. Lo lamento tanto Papá, y ya te pedí perdón, pero lo sigo lamentando. Entendí que me guste o no, sea arrolladora o no ésta verdad, me llamaste a tiempo completo, vida completa, a mi completa; y no a medias. Y eso fue justo lo que hice, mirarte a medias, buscarte a medias, amarte a medias. Cuando Tú me quieres y Me deseaste completa. No hay nada que hacer, te pertenezco, nací para la intimidad Contigo, no hay vuelta atrás, no tengo escapatoria, y ésta verdad puede resultar abrumadora, pero me gusta y no quiero escapar de Ti, aunque ni siquiera logro dimensionar lo que ésto signifique ni las medidas de Tu Amor. Es que descubrí que eres mi hábitat natural, mi dulce hogar, y la porción que me corresponde en La Vida. "Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos y es herm