El Maldito consejo de Balaam

 Balaam, el caído, pero con los ojos abiertos

En sus retóricas, Balaam se sabía conocedor de los dichos y oráculos de Dios, pero también se sabia caído, es decir, su corazón no era recto delante de Dios ya que se inclinaba a la codicia, por esto es llamado falso profeta es las Escrituras. Aquí observamos la primera enseñanza de esta entrada: un falso profeta podría dar profecías verdaderas, pero con un corazon pervertido, buscando sacar un provecho del oficio. Sabemos que Balaam quería los honores, regalos y poder que le ofrecieron los altos dignatarios del pueblo enemigo de Israel.

Cuando el Rey de Madián, vió de lejos al pueblo de Israel, se atemorizó porque sabía que Su Dios los saco de Egipto con mano fuerte y brazo extendido, entonces llamó a Balaam, a cambio de bienes y tesoros, para que lo maldijera y así poder derrotarlo en batalla, sin embargo El Dios que pelea las batallas de Israel se interpuso en el camino de Balaam y le prohibió maldecirlo, al contrario, Lo obligó a bendeci, no una sino tres veces con profecías extrtaordinarias, lo cual hizo enojar grandemente al Rey de Madian quien en reiteradas ocasiones intento sobornar a este profeta de corazon extraviado, que aunque no pudo maldecir al pueblo con sus labios, fue aquél que dio el consejo exacto de cómo podían ellos debilitar y maldecir a Israel.

Mandamiento del Dios Eterno

El Dios de Israel le dió un mandamiento supremamente importante a Su pueblo, les prohibió casarse, emparentar o asociarse con parejas de pueblos enemigos extranjeros, porque los haría alejar del Dios vivo para ir en pos de los ídolos y dioses paganos. Este mandamiento es hermoso, porque muestra el caracter protector de Un Padre. ¿Cuál Padre desea que sus hijos tengan malas juntas y se desvíen del camino? Ninguno que sea bueno. El Padre Eterno sabe que nuestra simiente es diferente, de santidad y pureza, mientras que la de los extraños es de maldad. Son pueblos cuya forma de vida y culto de adoración a sus dioses es abominable, por ej, cultos idolátricos de fornicación, incesto, orgías, entre otras.

Maldito Consejo

Balaam en su malicia y avaricia, siempre tentado a recibir honores y premios, finalmente les dio a los madianitas el consejo que acabaría por debilitar y maldecir al pueblo de Israel. Les habló acerca de este mandamiento, sabiendo que si las mujeres de Madián lograban seducir a los hombres de Israel, acabaría por generar mezcla, pecado y consecuentemente pérdida entre el pueblo, como en efecto sucedió reiteradamente  (Números 25 y 31:16). 

Apostasía de Salomón

Ni aún el hombre más sabio que ha existido en el mundo fue inmune a esta situación. A pesar de ser exhortado por Dios a cumplir todos los mandamientos para que su corazón fuera íntegro como el de su padre David, terminó desviándose y sirviéndole a otros dioses, a causa de su debilidad por las mujeres extranjeras a quienes se unió en yugo desigual.

La congregación debilitada

Esas historias no son solo casos aislados del antiguo testamento, podemos encontrar más casos como el de Sansón, o en el libro de Nehemías, etc; de hecho fueron dejadas para nosotros como testimonio para amonestarnos y guiarnos, porque hoy día el espíritu del mandamiento sigue vigente, Dios en Su misericordia nos repite: No te unas en yugo desigual con los incrédulos, pues tu cuerpo es templo de Mi Santo Espíritu, no lo hagas uno con el templo de la ramera, y esas son palabras fuertes. Esta situación se repite y mantiene cautivo a gran parte de nuestro pueblo, porque en su necesidad de sanidad emocional y amor, en lugar de buscarlo en el Padre, para que los sane y los restaure y los conduzca a relaciones de pacto que El sí bendiga, van y se enyugan (se casan, se hacen conyugues) con personas no creyentes, que quizás no parecen malas personas en sí mismas, pero el enemigo sabe muy bien cual es el consejo de Balaam y lo va a  usar en contra del pueblo que le abrió ésta puerta.

(1 Corintios 6:16 y 2 Corintios 6:14)